El Premio Nobel de la Paz 2014 han recaído sobre la adolescente paquistaní Malala Yousafzai y el activista indio Kailash Satyarthi. Aquí dejo un microrrelato hecho para Malala.
.Malala se quedó dormida y soñó un río de aguas cristalinas de sabiduría cruzado por puentes de oportunidad, logrando alcanzar la igualdad cada vez que anudaba su hijab.
Cuando
despertó, inmoló el área de la desigualdad de su mundo con la
fuerza del polvo de mil palabras.
A veces, en el Océano de la vida, surgen olas que destacan de las otras, de la mayoría. Por una u otra causa se hacen notar... No siempre de una forma agradable, para ellas mismas, ¡cierto!
ResponderEliminarOlas que marcan hitos en el caminar de la humanidad. Algunas no quisieran haber sido... pero son!
¿Son?...
¡Sin duda! Olas, al fin y al cabo!
Un gran abrazo Carmen.
¡Qué sería de nosotras, el resto de las olas, sin ellas. Un gran abrazo.
EliminarQuiera Dios que los sueños de Malala se conviertan en realidad. Bello homenaje.
ResponderEliminarmariarosa
Así sea, Mª Rosa. Un beso.
EliminarHola Aldonza: Un reconocido y hermoso homenaje a esta joven que lucha por la educación y la igualdad de la mujer, en este mundo caótico. Un gran abrazo amiga!!!
ResponderEliminarEs cierto Mercedes. ¡Qué caótico mundo dentro y fuera de nosotros! Un abrazo a amigas como tú.
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